Intervención psicoterapéutica que utiliza técnicas y procedimientos de manejo activo con el fin de implantar, mantener, fortalecer, reducir o extinguir conductas determinadas.
Los síntomas conductuales de la persona con deterioro cognitivo o demencia se presentan con una prevalencia muy alta y son predictores de un una mayor sobrecarga de la persona cuidadora, así como el aumento del uso de sujeciones físicas, químicas y la inminente institucionalización.
En el centro día el equipo multidisciplinar evalúa, diseña e intervine de manera individualizada y en consonancia con la familia en aquellos casos que sea necesario.
RECOMENDACIONES:
1- Permitir la participación activa en la dinámica diaria.
2- Evitar cambios de cuidadores.
3- Reorganizar y estructurar el ambiente.
4- Crear un ambiente estimulante pero con poco ruido visual.
5- Mantener una rutina diaria, sin importar el día que sea.
6- Simplicar actividades.
7- Reforzar las conductas positivas y funcionales.
8- Evitar los cambios bruscos de actividad.
9- Utilizar la guía verbal y manual.